Conquistar la felicidad en nuestro hogar debería ser algo mucho más habitual que lo que realmente hemos conseguido que sea en España. Son muchas horas las que pasamos dentro de nuestra casa a lo largo de todo un año, así que es evidente que estar cómodos dentro de ella puede ayudarnos de una manera muy importante para ser felices. Para ello, hay que tener en cuenta numerosas cuestiones. Una de ellas, que es de la que os vamos a hablar a lo largo de todo este artículo, es la que tiene que ver con el color para la fachada y para las paredes interiores de nuestro domicilio.
El color es algo relacionado de una manera inevitable con la vida de las personas. Los colores agradan o molestan, decoran o constituyen una imagen mejorable, así que es necesario dedicar un tiempo prudencial a tomar las decisiones que tienen que ver con ellos. Siempre hay un color que es más propicio que otro para un determinado lugar. A muy poca gente se le ocurriría pintar su casa de negro, ¿verdad? Sin embargo, para un coche es un color perfecto. Todo depende de de qué estemos hablando.
En una noticia publicada en la página web Mi Casa Revista se habla de un total de 25 colores con los que pintar las paredes de nuestra casa. Hay, en este ranking, colores de todos los tipos. Sofisticados, serios, atrevidos… Hay diferentes gamas de blancos o de grises, por ejemplo. También hay lugar para los azules, verdes, rosas… y también burdeos, naranjas o púrpuras. No cabe la menor duda de que todos estos colores nos permiten crear espacios que son muy diferentes entre sí. Por tanto, todos los gustos y estilos están representados dentro de este ranking.
¿Cuál es el color preferido de los españoles? Según la página web Marketing Directo, el azul es el color preferido por los españoles. Y es cierto que hay una cantidad cada vez más grande de viviendas en el interior de nuestras fronteras que están pintadas de un color como lo es este. Además, el azul es uno de los colores que mejor combina con otras tonalidades y su gama de intensidad es de las más potentes. Ya sabéis que nada tiene que ver un azul celeste con un azul marino. Hablamos de cosas que son completamente distintas y que, desde luego, hacen que la decoración de un lugar sea diferente.
El color del que está pintada una vivienda es uno de los aspectos más importantes para la decoración de la misma. Normalmente, en España hemos tendido a mantener el color exterior de nuestras fachadas, modificando el color de las paredes interiores. A día de hoy, según nos han indicado desde Decolor y según hemos podido comprobar en nuestros pueblos y ciudades, es cada día más común apostar por uno de nuestros colores preferidos para la fachada. El azul claro o el verde son dos de los que más habituales son en casi todos los lugares de la geografía española.
El color no es lo único, por supuesto
Es evidente que el color tiene una importancia muy grande en lo que respecta a la decoración de una vivienda, pero no es ni mucho menos lo único que debe tenerse en cuenta a la hora de apostar por esa decoración. Hay muchas cosas que no podemos pasar por alto, como la distribución del espacio, el tipo de muebles que queremos en nuestro domicilio y el tipo de ventanas o puertas que queremos que formen parte del hogar. Todo eso cuenta a la hora de construir ese hogar que siempre hemos querido tener.
Combinar todos esos aspectos muchas veces no es una tarea fácil, pero os tenemos que animar a que intentéis conseguirlo porque los resultados de eso son realmente interesantes. Es mucho mejor que dediquemos un tiempo a ese tipo de cuestiones en lugar de que otras personas se encarguen de elegir por nosotros o nosotras. Ni que decir tiene que somos nosotros y nosotras mismas las que podemos tomar las decisiones que van a ser mejores para nuestras propias vidas. Si las toman otras personas, quizá esas decisiones no se ajusten a lo que realmente queremos.
Ahora hay muchas más personas que tienen en cuenta estas cuestiones. Antes, la decoración era algo considerado como secundario por mucha gente. A día de hoy, con la importancia que se le atribuye a la imagen, eso ha cambiado de una manera realmente grande. Todos y todas queremos vivir en un espacio que nos venga bien y que veamos atractivo. Y esa es una señal de que nuestra comodidad y nuestras preferencias importan. Tenemos que seguir valorando e interviniendo en estas cosas para hacer posible la conquista de esa felicidad de la que hablábamos al principio.