¿Nos preocupa nuestra belleza? Por supuesto que nos preocupa. A veces, intentamos restarle importancia a este tema, pero la verdad es que, en el fondo, sabemos que es muy relevante para nuestro día a día. No cuela que digamos que la belleza está solo en el interior, porque no es verdad. El exterior sigue importando y, de hecho, es más importante que nunca ahora que vivimos en una sociedad como la actual, en la que la imagen tiene una relevancia tan grande. Y a la hora de fijarnos en una persona, sí, también nos fijamos en su exterior. Como es lógico, queremos que también tenga un bonito interior, que sea inteligente y buena, pero el exterior cuenta… y mucho.
Hay una información publicada en la web de la BBC que, en el titular, lanza la pregunta acerca de por qué estamos tan obsesionados y obsesionadas con vernos bien. En el desarrollo de la información, podemos ver cómo se hacen análisis en cada país y, en el caso de Brasil, el 61% de las personas consideran que una de las claves para tener éxito social es verse bien físicamente y que por eso hay una obsesión con todo lo que tenga que ver con la belleza y la estética.
Además de lo anterior, debéis saber que la belleza ya nos preocupa a todo el mundo. Ya no existe ese estereotipo que indicaba que era algo solamente propio de las mujeres. En una noticia publicada en la web de la Cadena Ser se habla de esto y lo relaciona con aspectos como la autoestima, el sentirse bien o el simple hecho de socializar. La belleza tiene el poder de hacernos sentir prácticamente invencibles y una sensación como esa es muy golosa para cualquier persona. Por eso, nos parece perfectamente lógico que siquiera cuidar de la belleza en todas sus facetas.
Cada vez son más las maneras con las que podemos contar para cuidar de nuestra belleza y una prueba de ello es la cantidad de categorías y servicios que pueden verse en una web como la del centro de estética Linaje. Ahora, podemos acceder a servicios de microblading, facial, corporal, cejas, pestañas, depilación láser, uñas… servicios que no siempre han estado tan a disposición de la gente. Esto ha proporcionado una dosis de tranquilidad a un número también creciente de personas que se interesan por este tema y que quiere sacar el máximo rendimiento posible de su estado físico.
Y es que todas y cada una de las cosas que hemos mencionado en el párrafo anterior tienen su relevancia a la hora de conseguir esa imagen que tanto queremos. Elementos como las cejas o las pestañas han sido tan importantes como la sonrisa puesto que son de las primeras que la gente suele mirar cuando conoce a otra persona. Cualquier tipo de depilación también se relaciona con el ser una persona bella, que hace todo aquello que esté en su mano por cuidarse. Y las uñas, además, son las reinas últimamente en lo que tiene que ver con la estética. Y no solo entre las mujeres.
La primavera es la estación preferida para cuidarse
Los registros de los distintos centros de estética que hay en España dejan claro que los mayores volúmenes de facturación se registran durante los meses de abril y mayo, en plena primavera. Además, en muchos centros de estética la diferencia entre la primavera y el resto del año fue muy grande en términos de facturación. ¿Por qué se produce esta situación? La lógica indica que, cuando llega el buen tiempo y empezamos a usar prendas de vestir que cubren mucho menos nuestro cuerpo, salimos más de casa y mostramos más todos aquellos atributos ligados a la belleza.
Cuando llega el frío, solemos pasar más de estos temas, aunque hay gente que prefiere cuidarse durante todo el año y apostar por su belleza en cada uno de los meses del año. El invierno suele ser más propicio para quedarse en casa, hacer vida en familia y no salir demasiado, lo que hace que nos relajemos en términos de belleza puesto que, a fin de cuentas, no tenemos esa necesidad de intentar convencer a la otra persona de lo bellas o bellos que somos.
Si una persona hace una comparativa de la cantidad de gente a la que ve durante el invierno a la que ve durante el verano, se dará cuenta de que hay mucha diferencia entre un momento y el otro. Durante los meses de calor vamos a la piscina, estamos muchas más horas en la calle y solemos salir bastante más de fiesta, algo que no siempre tiene lugar durante los meses más fríos del año. Por tanto, es lógico que durante los meses de primavera empecemos a tomarnos muy en serio todo lo que tenga que ver con la optimización de nuestra belleza.
Una tendencia global
Podemos decir que el cuidado de nuestra belleza es algo que podría ser considerado como una tendencia global. En prácticamente todos los países del mundo se ha disparado el interés por parecer más guapo o guapa y cuidar más de nuestro físico. Todo tiene que ver con algo que ya hemos destacado antes y que no es otra cosa que el desarrollo de distintas redes sociales.
Dos de las que han contribuido de una manera más poderosa a ese impulso de la imagen y la belleza son Instagram y TikTok. La primera de ellas ya supuso un cambio bastante grande con respecto a Facebook, que era la reina de las redes sociales antes de que apareciera. En Instagram, el perfil de fotos no es el mismo que se usa para Facebook. En Instagram siempre procuramos parecer más guapos y guapas. En lo que respecta a la segunda, ha sido la maximización de la primera. Si Instagram ya apostaba por la imagen, lo de TikTok lo ha elevado al cuadrado.
Lo mejor de todo es que, además, todo lo que tiene que ver con ese desarrollo de la imagen que ha provocado la aparición de estas dos redes sociales ha influido a un montón de personas de todas las edades. Nadie es demasiado mayor para apostar por todo lo que tenga que ver con su estado físico, así que procurad que no os asuste todo lo que diga vuestro DNI. Hay maneras de reducir el número de años que vienen contabilizados en él y son millones y millones de personas las que, estando ubicadas en cualquier lugar del mundo, se benefician de las distintas técnicas que existen para hacer que brillemos con luz propia.
Aprovechar las oportunidades que pone la vida ante nuestra mirada
Ya decíamos más arriba que existen más posibilidades que nunca para cuidar de nuestra belleza. Y eso es algo que no podemos dejar pasar, que no podemos desperdiciar. Muchas de las personas que ya son mayores o que han fallecido hubieran deseado poder vivir en el mundo en el que estamos ahora para poder haber dispuesto de la enorme cantidad de opciones en materia de cuidado personal y de belleza con las que contamos ahora. Tenemos que valorar lo que tenemos, algo que no siempre ocurre, y aprovechar la oportunidad que ha puesto la vida ante nuestros ojos.
Damos fé de que hay mucha gente que lo está haciendo… y eso nos reconforta. Decíamos al principio de este artículo que la belleza exterior sí que importa y que lo hace más que en ningún momento de la Historia. Por tanto, no podemos dejar escapar la oportunidad de cuidar de esto. Es algo que no nos perdonaríamos en la vida y que reduciría las opciones de sentirnos bien con nosotros o nosotras mismas, además de ponernos en franca desventaja con respecto a otras personas que sí pudieran estar cuidando de su imagen física.
La belleza es algo que debemos cuidar y que, aunque tenga muchas veces algo que ver con los genes, la tenemos que trabajar. Puedes ser una persona rubia, alta y con los ojos azules. Eso te viene dado por genética, pero si no cuidas de tus pestañas, de tus cejas, de tu depilación o de otros aspectos como estos, es posible que una persona con menor atractivo físico genérico termine siendo considerada como una persona físicamente más bella que tú por el simple hecho de que ella sí se ha tomado en serio todas esas cuestiones. Probablemente, no seas la primera ni la última persona que se encuentre en esta situación en todo el mundo.
Cuidar de la belleza muchas veces es hacerlo también de la salud. En muchas ocasiones, habréis notado que la belleza es un remedio para mejorar nuestro estado de salud mental, porque ya sabéis el impacto que tiene para la autoestima el poder encontrarnos bien con nosotros y nosotras mismas al mirarnos al espejo. Por eso hay más gente que nunca que busca corregir lo que entiende que son pequeñas imperfecciones en su rostro o en su cuerpo. Y aciertan. Lo que realmente te interesa es que tú también lo hagas.